¿Sabía que los jabones tradicionales generalmente se biodegradan a un ritmo más lento que los jabones espumosos?
Esto se debe, en parte, al uso de aire forzado, que es la causa natural de la formación de espuma. Como consecuencia de esto, se pierde menos jabón por los desagües, lo que es beneficioso para la salud del medio ambiente y de su bolsillo.